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El pasado 19 de abril se celebró en Piera, pese a la lluvia que nos acompañó durante toda la semana y que no fue excepción el domingo, el II Piera Motor Festival y 1er. Aniversario de los Corsarios MC Anoia. La localidad fue en, como su nombre indica,
Piera, a unos 60 kms. de Barcelona.
A las 8 de la mañana se ultimaban los últimos detalles para que todo estuviera listo a las 9, cuando se dió el pistoletazo de salida a la matinal que Corsarios MC Anoia habían preparado.
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La amplitud del recinto, dentro de una plaza bastante grande, con su auditorio y todo para que los músicos pudieran tocar sin mojarse fue escogido con acierto; y pese a que de vez en cuando parecía que el sol hacía como que pretendía hacer acto de presencia e instalarse
definitivamente, las nubes amenazaban de igual forma lluvia, a lo lejos, manifestándose como grandes formas imposibles en el cielo.
La gran cantidad de matinales organizadas para este día (7 en total) presagiaba a la hora del almuerzo una afluencia más reducida de lo que tocaba esperar, aunque también es verdad que la lluvia de toda la semana desanimó a muchos a salir el domingo a rodar
con sus motos. Pero a las 9,30 contra todo pronóstico el recinto se llenó de gente con hambre, los músicos empezaron a tocar y no dejaron de hacerlo hasta las 2 de la tarde. Hora en que el cielo no aguantó más y rompió a llover.
La gente se refugió en los stands de ropa, accesorios y demás que se habían instalado y allá donde se pudo. Al cabo de un rato, cuando la lluvi dejó de apretar fue el momento en que muchos aprovecharon para abandonar el lugar.
Y aunque muchos aguantaron bajo la lluvia o bajo las carpas, cerveza en mano, escuchando a la banda de música tocar, la verdad es que el evento quedó deslucido o, como mínimo, sin un final de fiesta digno para la matinal que Corsarios MC Anoia se encargaron de preparar.
Para otro año habrá que tener previsión anticipada y poner alguna que otra carpa donde la gente pueda cobijarse en caso de lluvia y seguir con la fiesta en vez de huir como cobardes a las cuatro gotas.
¡Nos vemos allí el año que viene!
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